Os parecerá una locura pero a mi hija le gusta la verdura. Muchas mamás de mi trabajo me preguntan que cómo se la preparo para que Alejandra coma acelgas, espinacas, judías verdes,... y yo siempre las digo que no se las doy con aceite y vinagre porque así no hay quien se las coma, tampoco un adulto y que me como un poco la cabeza para que en su dieta haya siempre verdura.
Os voy a contar de vez en cuando recetas maravillosas que me he inventado para que se las coma o que me las han dado otras personas y así lo sepáis vosotr@s también.
Judías verdes al estilo de la abuela Rosi o judías verdes en su jugo (para que salgan un montón de raciones y comer también adultos):
- medio kilo de judías verdes.
- 2 zanahorias hermosas.
- 2 patatas grandes.
- una cebolla pequeña o media grande.
- un diente de ajo.
- un tomate maduro.
- un chorrito de vino blanco.
- aceite.
- sal.
- laurel.
- agua.
Una vez que ves que ya no huele el alcohol le pones las judías verdes, las patatas y el laurel. Y medio vaso de agua. Cuando empieza a hervir bajas el fuego a más de la mitad y dejas que se cueza durante una hora a fuego muy lento para que se haga con ese poco jugo.
Al final quedan unas judías verdes con una salsa un poco espesa de tomate y se lo comen divinamente con su patata y su zanahoria.
No tengo fotos, a ver si me animo a poner alguna. Pero os puedo jurar que Alejandra desde antes de que tenga un año se las come. ¡Sin dientes! bien machacaditas.
Y me diréis, ¿antes del año le dabas comida sólida ? Pues sí, pero esa es otra historia que ya os contaré...
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